Reconstruyendo el Kabuto perdido de la armadura de Felipe II

En colaboración con Patrimonio Nacional y Ubisoft
2024-2025

Facebook Twitter

 

En el año 1584 llegaba a España la Embajada Tenshō, la primera delegación japonesa en suelo europeo. Sus emisarios, parte de la Compañía de Jesús, llegaron para realizar una campaña misionera que captara la atención de Felipe II, los príncipes cristianos y del papa, consolidando el poder y prestigio de la orden. Como medio diplomático, la orden obsequió a Felipe II con una colección de armas y armaduras exquisitamente elaboradas, entre las que se encontraba una armadura completa con un kabuto, el icónico casco de guerra japonés. Al igual que los cascos contemporáneos occidentales, los kabuto eran el elemento más importante de la armadura, por lo que su fabricación reflejaba el estatus social y el poder de quien lo poseía.

El casco original en la colección de la Real Armería © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

La colección japonesa de la Real Armería a la que pertenece el kabuto es una de las más antiguas de Europa. Los únicos registros visuales del kabuto, antes de que fuera víctima del devastador incendio de la Real Armería el 10 de julio de 1884, son dos fotografías tomadas por Jean Laurent a mediados del siglo XIX, junto con un dibujo contemporáneo en vista lateral. A pesar de que existen descripciones y crónicas que lo mencionan en catálogos históricos, estas imágenes son las únicas referencias para reconstruir el casco y devolverlo a su estado original. Esta falta de referencias visuales supuso un gran reto para Factum Arte a la hora de reconstruir físicamente la pieza. 

Secciones impresas en 3D y las referencias visuales © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

Escaneado y reconstrucción digital 

En agosto de 2024, Imran Khan, parte del equipo de Factum, llevó a cabo el escaneado del kabuto en la Real Armería, utilizando fotogrametría. A pesar del meticuloso escaneado, la superficie reflectante del acero hizo que el modelo 3D mostrase imperfecciones y texturas rugosas, aunque la superficie del kabuto fuera lisa. Tras limpiar estos defectos, el equipo recurrió a las fuentes históricas directas existentes para comenzar el proceso de reconstrucción.

Eduardo García estudiando el kabuto original en la Real Armería © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

Gracias a la ayuda de Álvaro Soler del Campo, director de la Real Armería, el equipo de Factum tuvo un acceso invaluable a los materiales en el archivo, lo que facilitó el trabajo de reconstrucción de las piezas perdidas en el incendio de 1884. Gran parte de los detalles del casco fueron originalmente modelados en laca japonesa tradicional (urushi), por lo que únicamente quedó intacto el armazón metálico subyacente.

Los ojos, las pupilas y otros elementos desmontables también se perdieron. Gran parte de estas piezas se remodelaron en 3D utilizando el software Zbrush, incluyendo la frente, los ojos, el shikoro (placas de metal superpuestas para proteger el cuello y los hombros), así como la estructura occipital; gravemente deformados por la acción del fuego.

Una vez se aprobó la reconstrucción digital, el siguiente paso fue imprimirlo en 3D en acero inoxidable 316, utilizando el Sintetizado Selectivo por Láser o SLS, una técnica con una precisión inigualable en comparación con otros métodos de fabricación. 

Las secciones impresas en 3D © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

Mempo impreso en 3D © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

Color, acabado y ensamblaje 

Tras imprimir el kabuto en 3D fue crucial determinar el color más adecuado de la laca urushi, además de decidir el enfoque general de la restauración. Durante esta fase fue fundamental contar con la ayuda de los expertos en arte japonés del Museo Stibbert, comprendiendo cómo habría lucido el kabuto a su llegada a la corte de Felipe II. Debido a que los primeros registros visuales datan de casi 300 años después, este análisis fue verdaderamente importante, además de utilizar un kabuto similar como referencia, también obsequiado a la corte española y que aún hoy en día conserva su laca roja original.

Eligiendo el tono adecuado para replicar la superficie lacada © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

Silvia Álvarez y Álvaro Soler del Campo eligiendo el tono correcto para replicar la superficie lacada © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

Eligiendo los hilos correctos para completar la compleja estructura que compone el shikoro que protege el cuello © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

El proyecto fue evolucionando a través del continuo contacto con la Real Armería, al mismo tiempo que Factum buscaba referencias contemporáneas de la era Azuchi-Momoyama (1573-1603) con características estéticas similares. Las investigaciones revelaron que este kabuto es una pieza verdaderamente excepcional en cuanto a su artesanía, distinta a cualquier otro ejemplar conservado. 

Las últimas intervenciones en el taller fueron dirigidas por Silvia Álvarez y Almudena Casado, incorporando todos los elementos capilares (cejas, bigote, perilla y cabello completo), así como el trenzado de seda que une el shikoro. El patrón de trenzado se cotejó con piezas similares de la colección de la Real Armería, mientras que el peinado se recreó siguiendo las descripciones de catálogos del siglo XVI y XIX.

Colocando el pelo de caballo en el casco terminado © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

Almudena Casado Bernal pegando las decoraciones de pelo de caballo © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

Componiendo el shikoro, el protector del cuello © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

Añadiendo los últimos detalles en el estudio de Factum Arte © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

Un enfoque fundamentado en la historia 

Todas las etapas de este proyecto han estado basadas en el rigor histórico, antes que atender a las sensibilidades estéticas contemporáneas. El objetivo no era producir un objeto acorde a los estándares modernos, sino asegurar que la reconstrucción fuera lo más fiel a la pieza original, así como a los archivos documentales que describen cómo pudo ser en el pasado, y al criterio académico.

El kabuto de Felipe II, recreado por Factum Arte © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

El kabuto de Felipe II, recreado por Factum Arte © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

El kabuto de Felipe II, recreado por Factum Arte © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

El kabuto de Felipe II, recreado por Factum Arte © Oak Taylor-Smith | Factum Arte

Preservación digital y accesibilidad 

Todos estos esfuerzos no solo han servido para devolver a la vida un artefacto histórico, sino que también han asegurado su accesibilidad en la era digital. En colaboración con Ubisoft y Patrimonio Nacional, el kabuto ha sido integrado en el Códice Cultural de Assassin’s Creed Shadows, donde los jugadores pueden explorar su historia y significado en el contexto del Japón Feudal. 

Al incorporar esta reliquia en la reconocida franquicia de videojuegos, la iniciativa une investigación histórica con tecnología moderna, permitiendo que seguidores del juego alrededor del mundo puedan interactuar con el patrimonio cultural de manera inmersiva e interactiva. 

El kabuto puede conocerse en persona hasta el 6 de abril de 2025 en la Galería de las Colecciones Reales en Madrid. Posteriormente, la pieza volverá a formar parte de la colección de la Real Armería, una vez reabra sus puertas al público. 

El kabuto reconstruido junto al original en las Colecciones Reales © VSM Photo Events

El kabuto reconstruido junto al original en las Colecciones Reales © VSM Photo Events

El kabuto integrado en el Códice Cultural de Assassin's Creed Shadows © Ubisoft Canada


 

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorr nuestros servicios mediante el análisis de sus hábitos de navegación.
Puede aceptar las cookies haciendo clic con el botón «Aceptar» o configurarlas o rechazar su uso haciendo clic en la Política de cookies.
ACEPTAR     RECHAZAR