En el taller de Factum Arte Madrid, dentro del Departamento de Estampación, se han estado llevando a cabo recientemente una serie de experimentos enfocados a lograr planchas de Mezzotinta, (técnica también conocida como 'manera negra'), con un alto grado de detalle, empleando tecnología de control numérico (CNC).
Se ha desplegado un fascinante diálogo a través del tiempo, animado por el mismo sentido del entusiasmo que experimentaron los innovadores que descubrieron, ya en el S.XVII, este proceso de reproducción a la media tinta. El proceso de la media tinta fue desarrollado por Ludwig von Siegen en 1642- cuando se dio cuenta, mientras limpiaba su arma, de que la pólvora incrustada en los dibujos grabados en las tapas de las cachas de la pistola, quedaban transferidos a modo de estampado en el trapo que estaba usando para limpiarla. Su primera mezzotinta se remonta a 1642 y representa la imagen de Amelia Elisabeth, Langravina de Hesse. Existe una carta de Ludwig von Siegen a William VI, hijo de la Langravina (cabe señalar que John Evelyn y Horace Warpole atribuyeron al primo mayor de William VI, Rupert del Rin la invención de la mezzatinta), en que von Siegen da muestras de ser plenamente consciente de la importancia que suponía esta innovación en la técnica de la estampación:

"No existe un solo grabador, un solo artista de clase alguna, que pueda dar cuenta o imaginar cómo ha sido realizado este trabajo, ya que, como bien sabe su Alteza, sólo existen tres métodos reconocidos de grabado, véase: primero, grabado o inciso, segundo, quemado con ácido o excavado; tercero un método que es muy poco utilizado y que se ejecuta mediante pequeños punteados realizados con punzones, pero que es difícil y tan arduo de realizar que apenas se practica. Mi método de ejecución difiere bastante de todos estos, a pesar de que uno no aprecia sino pequeños puntos sin línea alguna y, si en alguna parte del trabajo parecen existir sombreados, está sin embargo, completamente punteado, lo cual no quiero ocultar a su Alteza, tan versado en Arte como sois"

En Factum Arte, la técnica de Mezzontinta no se ha tratado como un género histórico en letargo, sino como un proceso material con un tremendo alcance para la innovación y la experimentación hoy en día, especialmente en combinación con tecnologías actuales. Esta actitud inclusiva hacia tecnologías diferentes, sin considerar su potencial obsolescencia, ha facilitado la innovación de métodos de grabado completamente nuevos, al tiempo que ha activado un intercambio apasionante de ideas, al disiparse las fronteras entre tono y profundidad. Existen tanto sistemas sustractivos como aditivos para crear planchas Mezzotint: 'de claro a oscuro' y 'de oscuro a claro'. En el primer caso, el proceso comienza con una plancha de cobre pulida. Se emplea un rodillo dentado o graneador, para crear un punteado por toda su superficie,lal cual se construye por capas de puntos, dando lugar a una rica imagen tonal. La alternativa corresponde al sistema más corriente, que comienza con una plancha cuya superficie ha sido granulada mediante un raedor. Factum Arte trabaja con Martin Maywood, un grabador establecido en Lincolnshire [http://www.mezzotint.co.uk], que prepara las planchas de cobre siguiendo el método tradicional. La plancha, cuya su superficie granulada tiene una textura similar al papel de lija, correspondería en este estadio al color negro de impresión. Entonces, se comienza a bruñir y rayar para extraer luces y medias tintas a partir del negro inicial. El sello distintivo de esta técnica lo constituyen sus tonalidades profundas y ricas, una cualidad que muchos estampadores definen con la expresión 'aterciopelada'. La experiencia real frente a la contemplación de una mezzotinta, evoca la sensación de que el negro no es tanto un pigmento con el cual se forma una imagen, sino un vacío completamente carente de luz.

Para el desarrollo de este proyecto, ha sido esencial diseñar y fabricar una serie de herramientas lo suficientemente versátiles para adaptarse tanto al método aditivo, como al sustractivo. Diseñadas por Arthur Prior, el principio funcional de esta herramienta es la elasticidad lineal- principio fundamental de la ley de Hooke, que establece que la fuerza ejercida por un muelle u otro objeto elástico, es proporcional a su extensión. El principio consiste en el hecho de que una plancha preparada con la superficie rugosa, puede bruñirse de manera selectiva para conseguir los tonos deseados, modulando la presión que se ejerce con la herramienta sobre dicha superficie. Este simple concepto ha requerido para su aplicación, del desarrollo de una herramienta de alta precisión, torneada por el Ingeniero de Oxford Tim Sampson, y provista de componentes modificados, producidos por una serie de firmas de ingeniería: THK (Japón)- eje estriado y rodamientos, M.Greene (UK) bruñidores de punta de carburo, Monaghan Tooling (Suiza)- abrazadera para compensación, Hommel+ Keller (Alemania) - fresas dentadas, ABSAAC (UK) - muelles mecanizados.

La experimentación en busca de este equilibrio entre tono y presión ha sido lograda, no a base de ensayo-error sino mediante un progresivo proceso de refinamiento en el cual, mediante la combinación de una serie de variables, se ha buscado producir planchas con un alto grado de detalle y matices tonales. El empleo de cartas de escala de grises resultó ser el medio indispensable para poder realizar la valoración de la evolución del proceso. Las imágenes que mostramos bajo estas líneas muestran el desarrollo de dicho progreso.

Bruñidor diseñado y fabricado por Arthur Prior

Vista en sección del bruñidor diseñado y fabricado por Arthur Prior

Plancha de prueba que representa dos Baubos griegas

Prueba